Julio en Provenza

El tiempo en julio

El mes de julio en Provenza se puede describir con dos palabras: sol y calor. La diversidad paisajística de la región permite disfrutar de un clima mediterráneo templado a orillas del mar Mediterráneo, mientras que cuanto más se aleja de la costa, como en Aviñón, por ejemplo, más cálido y seco se vuelve el clima continental. Las temperaturas suelen oscilar entre los 25 °C y los 35 °C, con días largos y soleados que dan paso a tardes suaves, perfectas para explorar la campiña francesa y disfrutar de la vida al aire libre.

La diversidad de paisajes de la región permite disfrutar de un clima mediterráneo templado a orillas del mar Mediterráneo, mientras que cuanto más se aleja de la costa, como en Aviñón, por ejemplo, más cálido y seco se vuelve el clima continental.

Los imprescindibles para llevar a la Provenza en julio

A la hora de decidir qué meter en la maleta para ir a la Provenza en julio, prepararse para el fuerte sol del verano es la prioridad absoluta. Lo que no se puede negociar es una crema solar con factor de protección elevado para proteger la piel del sol del mediodía. Hay mucho que explorar en la Provenza, por lo que hidratarse es fundamental: lleve botellas de agua reutilizables, sobre todo para los días que pasee por los mercados al aire libre y los lugares históricos. Un sombrero de moda y unas gafas de sol le protegerán del intenso sol del mediodía y se adaptarán a la moda local, mientras que la ropa ligera, transpirable y de colores claros le ayudará a mantenerse fresco.
Un calzado cómodo para caminar es esencial para recorrer las calles empedradas y las rutas de senderismo. Si le interesa saber más sobre esto, hemos elaborado una guía de nuestros senderos favoritos en la Provenza aquí. Si se aloja con nosotros, es probable que disponga de piscina privada, así que no olvide meter en la maleta el bañador para darse un chapuzón refrescante o para visitar las playas locales. Sin embargo, las noches en la Provenza pueden ser más frescas, así que asegúrese de incluir una chaqueta ligera o un abrigo en su equipaje.

Calor.

¿Por qué julio en Provenza?

En julio, la Provenza está llena de energía, desde la fragancia de la lavanda en flor y la maduración de las hierbas de verano hasta el sabor de los vinos locales frescos y la cocina de temporada. Es también el momento en que la región entra en su temporada alta de verano y cobra vida con festivales y eventos, celebrando su rico patrimonio cultural. El ambiente es perfecto para aquellos que deseen formar parte del auténtico estilo de vida provenzal. El sol brilla durante unas quince horas al día, desde la salida del sol hacia las 6 de la mañana hasta la puesta después de las 9 de la noche, por lo que tendrá mucho tiempo para explorar.

¿Qué hay en julio?

El Festival de Aviñón, uno de los festivales artísticos más prestigiosos del mundo, transforma la ciudad histórica en un gigantesco escenario de teatro, danza, música y artes plásticas. Las representaciones, que se celebran anualmente en julio, tienen lugar en lugares emblemáticos como el Palacio de los Papas y en patios íntimos, creando una atmósfera repleta de creatividad. Con una gran variedad de espectáculos, entre los que se incluyen actuaciones para toda la familia y talleres, en el Festival de Aviñón hay algo para todos los gustos, lo que lo convierte en una visita obligada para los amantes del arte.

El Día de la Bastilla, el 14 de julio, es otro de los acontecimientos más destacados y una visita obligada para los visitantes. Esta fiesta nacional conmemora la Revolución Francesa con celebraciones familiares por toda la región. Desfiles, fuegos artificiales, conciertos y comidas populares, la mayoría gratuitas.

Para disfrutar de los fuegos artificiales más impresionantes del Día de la Bastilla, diríjase a Marsella o Aix-en-Provence. Estas ciudades ofrecen espectaculares espectáculos con deslumbrantes silbidos, estruendos y destellos, que suelen comenzar entre las 22:00 y las 23:00 horas. Le recomendamos que llegue pronto para asegurarse el mejor sitio. Nuestro consejo es que siga a los lugareños hasta los miradores más alejados de las celebraciones centrales para disfrutar de las mejores vistas. Prepárese para un día completo de festejos llevando agua, crema solar y tentempiés para los niños. Los desfiles tradicionales, los mercados locales y los cautivadores espectáculos callejeros le mantendrán entretenido todo el día. Los lugareños participan con entusiasmo, así que espere calles concurridas, cortes de carreteras y bares que se extienden por los paseos. Tanto si se encuentra en un pequeño pueblo como en una bulliciosa ciudad, experimentará el ambiente festivo y el espíritu patriótico que hacen que el Día de la Bastilla en Francia sea realmente especial.